Messi, Rosario y el pulpo

Anoche leí a varios rosarinos de mi timeline «tuiteril» que hablaban sobre el nuevo spot de la Municipalidad de Rosario de parte de su campaña «Yo amo Rosario» y que desde este blog se habló mucho en su momento. Con la participación de «Lío» Messi, uno de los rosarinos más famosos en el mundo, el…

Por Federico Aikawa

Anoche leí a varios rosarinos de mi timeline «tuiteril» que hablaban sobre el nuevo spot de la Municipalidad de Rosario de parte de su campaña «Yo amo Rosario» y que desde este blog se habló mucho en su momento.

Con la participación de «Lío» Messi, uno de los rosarinos más famosos en el mundo, el delantero imagina o sueña con una ciudad «barcelonizada» en cada uno de sus rincones, con gente comiendo paella, damas españolas e hinchas del equipo que tantas alegrías le dio al fútbol mundial.

Y si bien creo que el spot está bien (quizás Messi también podría soñar con un catalán comiendo un carlito o Central y Newell’s jugando en el Camp Nou, pero no le vamos a pedir tanto al crack), me causó algo de gracia cuando vi al padre con su hijo pescando un pulpo en Costa Alta, cerca del puente que une a la ciudad con Victoria.

Quizás no muchos lo recuerden, pero en un viejo encuentro de Colectividades, que dicho sea de paso esta semana comienza la edición 27º, un tal Manolo de la colectividad gallega echó 18 kilogramos de pulpo al río Paraná. Según las crónicas periodísticas de la época, la orden que recibió el amigo fue «Manolo, tirá los pulpos al agua».

El diario Crónica publicó en su edición del 11 de noviembre de 1994: «El gracioso episodio sucedió ayer en la feria de colectividades que se desarrolla desde el sábado pasado -hasta el próximo domingo- en el Parque Nacional de la Bandera. Mientras decenas de personas formaban fila para adquirir una cazuela de la tradicional paella gallega, el encargado de preparar la comida solicitó a uno de sus ayudantes que arrojara dieciocho kilogramos de pulpo dentro de una olla de cobre repleta de agua hirviente. Pero, tal vez distraído, Manolo tomó la partida de moluscos y la arrojó al río Paraná, distante solo doce metros del lugar. Sin poder salir de su asombro, los restantes integrantes del puesto decidieron cancelar el plato y disculparse ante los hambrientos visitantes que aguardaban una porción de la típica comida española. Los concurrentes debieron conformarse con una porción de «Pulpo a la gallega», en cuya producción no había participado don Manolo.«.

El hecho se volvió una clásica humorada del Encuentro y todos los que formamos parte del mismo y que nos toca un stand cerca del río, solemos recordarla en algún momento, y fue muchos años antes de la llegada del famoso «Pulpo Paul«.

Desconozco si Seba Abramovich, el creativo detrás de todos los spots, hizo esto recordando este episodio o no, pero fue lo primero que pasó por mi cabeza. Y como miembro de la colectividad japonesa….¡Vayan a Colectividades 2011!.

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