La princesa Kako cumplió 29 años

Comprometida con la igualdad de género y el apoyo a comunidades, cerró un año con muchos deberes oficiales para la Casa Imperial japonesa

Por Federico Aikawa

La princesa Kako, segunda hija del príncipe heredero Akishino y la princesa Kiko, cumplió 29 años el 29 de diciembre, celebrando un año lleno de compromisos oficiales y un enfoque claro en la promoción de la paz y la diversidad en la sociedad, según la Agencia de la Casa Imperial.

A lo largo del último año, la princesa Kako se ha involucrado en una gran cantidad de eventos oficiales, reflejando la disminución de las restricciones vinculadas a la pandemia de COVID-19.

En mayo, la princesa viajó a la prefectura de Miyagi, principalmente para asistir a un festival de áreas verdes urbanas. Durante este viaje, visitó un museo y otros lugares relacionados con el terremoto y tsunami de marzo de 2011 en Japón, ubicados en la ciudad de Ishinomaki. Esta experiencia renovó su comprensión sobre la importancia de preservar la memoria de la tragedia que afectó gravemente al noreste de Japón.

En septiembre, la princesa Kako asistió a una ceremonia en la Universidad de Tohoku conmemorando el 110 aniversario de la admisión de las primeras mujeres a la universidad en Japón. Durante el evento, describió la aceptación de las mujeres por parte de la universidad, situada en Sendai, como «un importante primer paso».

Además, expresó su deseo por la igualdad de género en un evento llevado a cabo en octubre en Tokio por las Girl Scouts de Japón.

Al mes siguiente, la princesa realizó una visita oficial a Perú, asistiendo a una ceremonia que conmemoraba los 150 años de relaciones diplomáticas entre Japón y el país sudamericano, así como se reunió con personas de ascendencia japonesa. Kako expresó su gratitud por la cálida bienvenida recibida y las interacciones que pudo tener con numerosas personas durante su estancia.

La princesa continúa desempeñando deberes oficiales relacionados con el lenguaje de señas. En agosto y septiembre, ofreció discursos en lenguaje de señas en competiciones de discurso y actuación para estudiantes de secundaria.

Durante su visita a Perú, utilizó el lenguaje de señas peruano en una escuela para personas sordas, mostrando su apoyo a esta comunidad.


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