El barrio EUR de Roma tiene una interesante historia que se remonta a la época fascista. Fue creado en 1935 por Benito Mussolini como parte de la Exposición Universal Europea de 1942 que nunca llegó a realizarse. Al caminar por sus calles, se puede apreciar la influencia del racionalismo en su arquitectura y la magnitud de sus edificios. Los arquitectos más destacados de la época, como Piacentini, contribuyeron a la creación de edificaciones imponentes y geométricas, como la plaza Coliseo, el Obelisco y la Basílica de los Santos Pedro y Pablo.
Después de la Segunda Guerra Mundial, el barrio quedó destruido y se reconstruyó lentamente a partir de 1952, convirtiéndose en un punto de referencia importante para la ciudad en la década de 1980. Hoy en día, el EUR es un área única con amplias calles, enormes edificios de mármol blanco y una ubicación privilegiada entre el río Tíber y Laurentina. La zona ha experimentado un auge en la construcción de edificios privados, de oficinas y centros comerciales modernos, así como la creación de rascacielos con arquitectura original.
Además, el EUR ofrece un respiro de la ciudad con sus amplios espacios verdes, el Laghetto dell’EUR, una zona navegable con fuentes y juegos de agua rodeados de un gran parque, bares y atracciones para niños. También es un lugar popular para producciones cinematográficas y publicitarias debido a sus estructuras arquitectónicas notables, como el Palazzo della Civiltà, el Obelisco de Dazzi, el Obelisco de Pomodoro y el Centro de Congresos de Italia.
Hay muchas cosas que hacer en el barrio EUR. Puede disfrutar de un paseo para admirar las estructuras arquitectónicas, pasar tiempo con la familia en el Luneur o el Planetario, o incluso realizar actividades deportivas en el Laghetto.
El barrio también tiene una vida nocturna animada con clubes nocturnos famosos como la sala 26 y Spazio 900. Hay opciones gastronómicas para todos los presupuestos, desde comida rápida hasta el restaurante panorámico con estrella, Il Fungo, con vistas impresionantes.
El EUR también está bien comunicado con el resto de la ciudad a través de la vía arterial Cristoforo Colombo, tranvías, líneas de autobús y el metro B. Además, está cerca del parque Appia Antica, que es una inmersión en el pasado de la Roma imperial.